Serbia se caracteriza por un paisaje diverso, con llanuras onduladas, fértiles valles fluviales y montañas escarpadas. El pico más alto del país, Midžor, en los Montes Balcanes, se eleva a una altura de 2169 metros y ofrece unas vistas impresionantes del paisaje circundante. El paisaje incluye los frondosos bosques del Parque Nacional de Tara, los pintorescos meandros del río Uvac y las vastas llanuras de Vojvodina. Esta topografía diversa fomenta actividades como el senderismo, el rafting y la exploración de lugares históricos en medio de la rica campiña serbia.
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